28 de diciembre 2007 (CCC News) – El Partido Laborista australiano, que asumió el poder recientemente tras vencer en las elecciones legislativas de noviembre, se comprometió a evitar la “caza científica” de ballenas, y el primer ministro, Kevin Rudd, evalúa opciones frente al próximo comienzo de temporada del programa japonés JARPAII, entre las que se encuentra enviar un buque de guerra para vigilar las actividades balleneras.

Sin embargo, el opositor Partido Liberal, que en el poder se limitó a realizar protestas diplomáticas, advirtió al gobierno australiano no enviar un barco de guerra por temor a causar una acción equivalente de los japoneses.

Entre las opciones se estudia destinar, en reemplazo al buque de guerra, al de tripulación civil “Oceanic Viking”.

“Soy completamente consciente de la profundidad y fortaleza de nuestras relaciones diplomáticas con Japón”, afirmó Rudd.

Se espera que la flota ballenera de Japón llegue esta semana al Océano Antártico para capturar 935 ballenas minke, 50 ballenas de aleta y 50 ballenas jorobadas, bajo el pretexto de usar los cadáveres para la investigación científica. Sin embargo, la carne de ballena se vende en los supermercados nipones.

El buque “Oceanic Viking” de 105 metros, se ha usado para perseguir e incautar barcos extranjeros que realizan caza furtiva de peces en aguas australianas. Está equipado de ametralladoras de alto calibre y posee un sofisticado equipo de video, que puede utilizarse para reunir pruebas para cualquier acción legal internacional contra la matanza de animales.

Acciones Nacionales

Chile ya suma varias medidas de protesta contra la caza de ballenas que pretende realizar Japón en aguas del Santuario Ballenero Austral, entre las que se cuenta un proyecto de acuerdo aprobado de forma unánime por el Senado el 04 de diciembre pasado, en el que solicita una protesta oficial de Chile ante Japón. El texto fue presentado por un grupo de 23 senadores, quienes le piden a la mandataria que además informe de este acuerdo a todos los países miembros de la Comisión Ballenera Internacional.

Entre las medidas de largo plazo, se encuentra la petición de Centro de Conservación Cetacea y Centro Ecocéanos en conjunto con Conapach y apoyadas por un centenar de organizaciones civiles nacionales e internacionales y por parlamentarios de distintos sectores, quienes solicitaron a la Presidenta Bachelet que declare Santuario de Ballenas las aguas jurisdiccionales chilenas, donde se prohíba definitivamente las operaciones de caza comercial y científica, asegurando de esta manera la conservación de las diversas especies de cetáceos que se encuentran en las aguas de nuestro país.

Esto tuvo eco en la cámara de diputados que aprobó un proyecto de acuerdo el 06 de diciembre, donde se manifiesta la intención de “crear en todo el territorio marítimo chileno, incluidos los territorios antárticos e insulares, y hasta la distancia de 200 millas marinas, un santuario de ballenas, de manera que en el mar de las costas nacionales las ballenas encuentren el necesario refugio donde no se las pueda cazar, ni aún para los denominados ‘fines de investigación’”.

Es importante que el Gobierno de Chile defina una posición clara en esta materia con miras a la realización de la CBI60 en nuestro país en junio 2008.

Fuentes: 123.cl, Radio Universidad de Chile, CCC