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Con unidad y movilización se inicia campaña de desobediencia civil contra ley Longueira

Con esta acción pública pasamos desde las demandas sectoriales, a las exigencias como ciudadanos libres, porque es necesario el cambio del corrupto, excluyente y desprestigiado modelo político binominal y pinochetista que da sustento a la dictadura económica neoliberal imperante. Los ciudadanos tenemos la obligación y el derecho a denunciar y oponernos pacíficamente a través de la desobediencia civil a la imposición de leyes injustas como lo es la Ley Longueira, impuesta por un Parlamento seriamente cuestionado por la mayoría de los ciudadanos, el cual pretende entregar la propiedad de los peces de la actual y futura generaciones de manera gratuita y a perpetuidad a siete de las familias más ricas del país.

Con fuertes llamados a la unidad, movilización y el fortalecimiento de la alianza entre estudiantes, trabajadores, pueblos originarios, pescadores artesanales y la ciudadanía organizada se llevo a cabo este martes la protesta contra la Ley Longueira y la Democracia Cristiana, la cual culminó con una fuerte represión policial en las afueras del ex Congreso Nacional en Santiago de Chile.

La protesta se inició en la central esquina de Alameda con Ahumada, donde se congregaron alrededor de 1000 ciudadanos y dirigentes sociales con lienzos, pancartas y carteles en repudio a la Ley Longueira. Ese mismo día comenzaba la última jornada de votación en el Senado de la República. Luego avanzaron por varias cuadras de calle Ahumada rumbo al edificio del Senado en Santiago, la caravana se detuvo en las escalinatas del Banco de Chile, donde diversos representantes de las organizaciones sociales coincidieron en su llamada a rechazar la nueva Ley de Pesca y a desobedecerla de manera pacífica y propositiva.

A partir de esta primera jornada de protesta nacional contra la Ley Longueira, la ciudadanía chilena busca recuperar el derecho a manifestarse libremente por las calles y plazas del país, sin tener que pedir permiso al burócrata de turno de la intendencia local.

Los dirigentes de las organizaciones estudiantiles, trabajadores y de pescadores convocantes señalaron que el inicio de desobediencia civil también pasa por la forma como se convoca a los ciudadanos a manifestarse pacificamente en las calles, que son sitios públicos.

“Con esta acción pública pasamos desde las demandas sectoriales, a las exigencias como ciudadanos libres, porque es necesario el cambio del corrupto, excluyente y desprestigiado modelo político binominal y pinochetista que da sustento a la dictadura económica neoliberal imperante”, afirmó el Director del Centro Ecoceanos, Juan Carlos Cárdenas

“Los ciudadanos tenemos la obligación y el derecho a denunciar y oponernos pacíficamente a través de la desobediencia civil a la imposición de leyes injustas como lo es la Ley Longueira, impuesta por un Parlamento seriamente cuestionado por la mayoría de los ciudadanos, el cual pretende entregar la propiedad de los peces de la actual y futuras generaciones de manera gratuita y a perpetuidad a siete de las familias más ricas del país”, dijo Cárdenas.

ACES y FECH: UNIFICAR LUCHAS EN DEFENSA DE RECURSOS NATURALES

Eloísa González, dirigenta de la Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios (ACES) señaló en una de sus intervenciones que “nos pueden quitar nuestros derechos fundamentales, nuestros recursos naturales, pero no nos quitarán nuestra dignidad, porque el pueblo vuelve a salir a las calles”.

“El día de hoy debemos pasar del discurso a la acción. Nosotros en unión con otros sectores tenemos que avanzar hacia la construcción de un proyecto país que represente realmente al pueblo y sus intereses. Un cambio que se unifica y se constituye fuera de la institucionalidad, donde el pueblo lucha en las calles. El pueblo de Chile ha despertado y hoy está dispuesto a emprender esta lucha”, aseguró Eloisa González.

La dirigenta de los estudiantes secundarios llamó a unificar fuerzas entre los distintos sectores sociales en rechazo a “los conglomerados políticos y económicos que han gobernado durante varios años, porque la dictadura permanece hasta hoy con distintas sombras, bajo distintas caras”.

En tanto Andrés Fielbaum, presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECH), dijo que “la Ley de Pesca, como también la frustrada licitación del litio o la venta del cobre, demuestra una vez más que la negación de nuestros derechos básicos es simplemente un tema de voluntad política. Nuestro país sigue regalando nuestros recursos naturales, los que podrían servir para financiar salud y educación gratuita, pensiones dignas para nuestros abuelos”.

El presidente de la FECH aseguró que “tanto la derecha como la Concertación siguen haciéndose ricos con un modelo que continúa empobreciendo y mercantilizando todos los aspectos de nuestras vidas. Es hora que el pueblo chileno siga avanzando en unidad, en articulación y organización porque solamente de esta forma seremos capaces de combatir a los poderosos que siguen precarizando nuestras vidas”.

“Por eso estamos en esta protesta, no solamente porque consideramos que la Ley de Pesca es importante, sino porque entendemos que en la medida que vayamos avanzando en unidad entre los distintos sectores en lucha, seremos capaces de ir avanzando en fuerza y en enfrentar a los grandes monstruos que nos vienen oprimiendo desde hace más de 30 años. Un saludo compañeros y mucho aguante porque esto está recién empezando”, señaló Fielbaum.

PESCADORES ARTESANALES: LEY DE PESCA, TEMA PAÍS

Cosme Caracciolo director de la Consejo Nacional de Defensa del Patrimonio Pesquero, inicio su discurso agradeciendo de parte de la pesca artesanal la unión de los distintos sectores presentes en la protesta social contra la Ley Longueira. “La Ley de Pesca no es un tema de los empresarios pesqueros, ni de los pescadores artesanales, sino que es un tema de país. Está en discusión el patrimonio pesquero de Chile para siempre”, señaló Caracciolo.

“La semana pasada el Senado aprobó la entrega en propiedad por 20 años renovables de más del 80% de los peces de este país. Por eso, los pescadores artesanales nos vamos a revelar contra la Ley Longueira, que está siendo aprobada en el Senado en colusión entre la derecha y algunos parlamentarios de la Concertación”.

“Llamamos a la desobediencia civil porque no podemos aceptar una Ley injusta, que amenaza la sobrevivencia de la pesca artesanal y nosotros nos negamos a morir”.

Fuente: Radio del Mar