El llamado, que se realizará el lunes 03 de diciembre 2007 frente al Palacio de la Moneda, cuenta con el apoyo de cerca de un centenar de organizaciones nacionales, regionales e internacionales y busca que Chile consolide de manera permanente su compromiso con la conservación y el uso no letal de los cetáceos antes de la realización de la 60ma reunión de la Comisión Ballenera Internacional que se realizará en el país en junio del próximo año. Durante el acto estará presente “Santu”, una réplica en tamaño natural de una ballena minke de siete metros de largo.

Santiago de Chile, domingo 02 de diciembre 2007 (CCC News) – Más de noventa organizaciones civiles chilenas, regionales e internacionales, apoyaron el llamado impulsado por el Centro de Conservación Cetacea y Centro Ecoceanos, en conjunto con la Confederación Nacional de Pescadores Artesanales, CONAPACH, para solicitar a la Presidenta, Michelle Bachelet, “promulgar una Declaración Presidencial mediante la cual se proclame como Santuario para las poblaciones de ballenas al Mar Territorial y Zona Económica Exclusiva (ZEE) de la República de Chile, con el objetivo de prohibir definitivamente las operaciones de caza comercial y científica en aguas jurisdiccionales, contribuyendo de manera decisiva al esfuerzo global de conservación de las amenazadas especies de cetáceos y sus ecosistemas marinos”.

La carta, suscrita por más de 90 organizaciones de conservación y turismo de América Latina, Norteamérica, Europa y Oceanía, y que será entregada este lunes en el Palacio de La Moneda afirma que “Dicha medida (…) constituirá una relevante señal internacional y regional, tomando en consideración que la decisiva 60ma reunión de la Comisión Ballenera Internacional se realizará el próximo año en Santiago de Chile”.

Las organizaciones adherentes a la carta agregan que “a pesar que las ballenas se encuentran desde hace dos décadas protegidas de los efectos de la caza comercial, su baja tasa reproductiva y los crecientes impactos provenientes de las actividades de pesca industrial, transporte marítimo, contaminación de origen urbano, cambio climático global, entre otras, no han logrado que sus poblaciones se recuperen de más de 200 años de capturas destructivas, las cuales dejaron a varias de estas especies en peligro de extinción”.

La carta entregada a la Presidencia de la República de Chile, también fundamenta la necesidad de prohibir todo tipo de operaciones de caza de cetáceos en aguas chilenas ya que actualmente estas especies sólo se encuentran protegidas de manera temporal mediante una “medida de administración pesquera que no representa los intereses y la posición expresada por los ciudadanos chilenos desde la recuperación del sistema democrático, en relación a la política que debería tener el país sobre conservación y uso no letal de las poblaciones de cetáceos y sus ecosistemas”.

Adicionalmente, el documento destaca que este llamado ciudadano ya cuenta con el apoyo político de la Cámara Alta, la cual “solicitó en Mayo de 2007 a la presidenta de Chile consolidar una Política Nacional de Conservación y Uso No Letal de Cetáceos, la cual prohíba definitivamente las operaciones de caza comercial y la denominada ‘caza científica’ de cetáceos en aguas chilenas, así como el establecimiento de un marco legal que garantice como un compromiso permanente del país el uso no letal de las especies de cetáceos”.

Finalmente, la carta afirma que “El Santuario de Ballenas es una opción políticamente viable y ambientalmente necesaria, la cual responde a un tema de gran sensibilidad pública” y concluye que su establecimiento “permitirá garantizar la continuidad de las actividades de investigación no letal y de turismo responsable de avistaje, actividad que constituye una alternativa económica de creciente desarrollo a nivel global durante las últimas décadas, permitiendo a las comunidades y regiones costeras fortalecerse económica, social y culturalmente”.

Para Elsa Cabrera, directora ejecutiva del Centro de Conservación Cetacea, “la declaración de las aguas chilenas como Santuario de Ballenas es una alternativa políticamente viable ya que significa extender de manera permanente la protección brindada a las especies de cetáceos en Chile, por lo que no debería existir ninguna razón para impedir la declaración del Santuario”.

Cabrera agregó que “cualquier rechazo a esta iniciativa sería preocupante ya que podría indicar un debilitamiento de las políticas de conservación y uso no letal de cetáceos que promueve el país a nivel internacional”.

INFORMACION ADICIONAL

1. Las especies de cetáceos en Chile se encuentran protegidas hasta el año 2025 de las operaciones de caza mediante un decreto de administración pesquera (D.S. 225 de la Subsecretaría de Pesca) que no refleja el compromiso permanente que mantiene el país frente a la comunidad nacional e internacional de conservar y utilizar a estos mamíferos marinos mediante métodos no letales.

2. La declaración de las aguas chilenas como Santuario de Ballenas, forma parte de las políticas de conservación regional del bloque latinoamericano de países conservacionistas de la Comisión Ballenera Internacional y del Grupo de Buenos Aires, del cual Chile es miembro activo.

3. La declaración de las aguas jurisdiccionales chilenas como Santuario de Ballenas, es la base para construir una Política Nacional de Conservación y Uso No Letal de Cetáceos, que incluya entre otros, los criterios para establecer Áreas Marinas Protegidas para Cetáceos en Chile.

4. La declaración del Santuario de Ballenas concuerda con los Proyectos de Acuerdo adoptados por unanimidad en el Senado de la República de Chile en 2006 y 2007, los cuales hacen referencia sobre la necesidad de otorgar mayor prioridad al tema de preservación de ballenas y la necesidad de consolidar una política nacional de conservación y uso no letal de los cetáceos.

5. La implementación del Santuario de Ballenas Chileno permitirá brindar las garantías necesarias para desarrollar actividades económicas sustentables y a largo plazo por medio de métodos no letales como el turismo de observación de cetáceos y promover el desarrollo de investigaciones científicas destinadas a la regulación eficiente la actividad.

6. El Santuario de Ballenas Chileno contribuirá a posicionar al país como un destino emergente del turismo de avistaje de cetáceos, una actividad que genera más de dos millones de dólares anuales a nivel mundial y beneficia social, ambiental y económicamente a las comunidades que lo desarrollan.

Fuente: Centro de Conservación Cetacea