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Unión Europea condena caza de ballenas de Japón en el Pacífico Norte

31 de Julio de 2017 – En carta formal dirigida a la Comisión Ballenera Internacional (CBI) la Unión Europea criticó duramente al gobierno de Japón por reanudar la denominada caza “científica” de ballenas en el Pacífico Norte.

En la declaración, los 25 países miembro de la Unión Europea lamentan que Japón haya iniciado operaciones balleneras en el Pacífico Norte antes que el Comité Científico de la CBI haya completado la revisión del denominado programa de “caza científica”, conocido como NEWREP-A.

Agregan que esta determinación del gobierno de Japón “va contra diversas medidas adoptadas por la Comisión en 2014 y 2015”. Estas medidas, orientadas a solucionar las constantes violaciones e irregularidades cometidas por Japón bajo el pretexto de la caza “científica”, han sido sistemáticamente ignoradas por las autoridades japonesas.

Adicionalmente denuncian que la captura de ballenas sei podría violar las regulaciones de la Convención Internacional sobre el Comercio de Especies Amenazadas (CITES), ya que Japón no cuenta con reservas sobre esta especie en el Pacífico Norte, la cual se encuentra protegida bajo el Apéndice I.

También notan con extrema preocupación que la población de ballena minke sujeta a estas operaciones balleneras (stock J) se reducirá en un 20 por ciento durante los próximos trece años como resultado de estas matanzas. “Dado lo anterior, estamos desilusionados que el gobierno de Japón haya emitido Permisos Especiales de caza científica en el Pacífico Norte”, concluyen los representantes de la Unión Europea, y agregan que “llamamos al gobierno de Japón a reconsiderar su posición en esta materia (…) y colaborar con los procesos establecidos por la CBI”.

Para Elsa Cabrera, directora del Centro de Conservación Cetacea “la conducta del gobierno de Japón en el Pacífico Norte y el Océano Austral debería ser condenada por todos los miembros de la CBI, ya que la caza “científica” de ballenas no sólo amenaza la conservación de las ballenas. También cuestiona profundamente la capacidad de este organismo internacional para hacer cumplir las medidas adoptadas por sus miembros”.

FuenteCentro de Conservación Cetacea