Ballena Sei
Nombre científico:
Balaenoptera borealis
Otros nombres comunes:
Ballena sei
Ballena boba
El cuerpo de este cetáceo es delgado y esbelto, pudiendo medir 18 m de largo. Desde una vista dorsal de la cabeza el hocico se observa menos redondeado que el de la ballena azul y menos puntiagudo que el de la ballena de aleta. Presenta una aleta dorsal bastante encorvada, ubicándose más adelante que en otras especies de rorcuales. Las aletas pectorales y caudales son pequeñas. Posee una única cresta longitudinal que va desde los orificios nasales hasta la punta del hocico. El soplo parece un cono invertido como el de la ballena de aleta, pero más bajo y abundante. Presenta entre 30 y 60 pliegues gulares en la zona ventral de su cuerpo y su coloración es gris oscura con cicatrices ovaladas gris claro y zonas más blancas en el vientre.
El período de gestación en esta especie dura entre 11 y 12 meses y la lactancia más de 6 meses.
Se alimenta principalmente de krill pero puede comer calamares y peces de hasta 30 cm, los que captura nadando en forma regular en la superficie del agua con la boca abierta.
Posiblemente sea la más rápida de las ballenas, nadando a velocidades de 50 km/hr. Se suelen ver en grupos de 2 a 5 individuos, pero en zonas de alimentación pueden observarse grupos más numerosos. Se les observa nadando cerca de la superficie y no presentan una conducta de saltos tan frecuente como otras especies de rorcuales. Generalmente salen del agua en un ángulo pequeño, cayendo con el vientre y desapareciendo con rapidez.
Esta ballena está presente en todos los océanos del mundo, especialmente en latitudes medias. Se reconocen tres stocks poblacionales en el Atlántico Norte, Pacífico Norte y Antártica.
En Chile durante los tiempos de la caza ballenera hubo registros de esta especie (32-38°S) aunque algunos de éstos pudieron corresponder a ballenas de Bryde. Sin embargo, CCC a través del Proyecto Alfaguara a registrado en variadas ocasiones la presencia de ballenas sei al noroeste de la Isla Grande de Chiloé a los 42°S.
Al convivir con otras especies de ballenas consideradas más “rentables”, sólo se comenzó a cazar esta especie a mediados de los años 60, cuando los otros stocks de ballenas habían declinado. Actualmente la ballena sei se ve afectada por colisiones con embarcaciones y es víctima de los denominados programas de caza científica realizados por países miembros de la Comisión Ballenera Internacional.