Tokio, Japón. 07 de Agosto de 2002 – Desde la 54ta reunión de la Comisión Ballenera Internacional (CBI), realizada el pasado mes de Mayo en el puerto japonés de Shimonoseki, Estados Unidos y la nación nipona mantienen una fuerte disputa sobre la renovación por cinco años de las cuotas de caza de ballena franca de Groenlandia (Balaena mysticetus) que permitiría a las comunidades aborígenes de Alaska, cazar 55 ballenas de esta especie anualmente.
Por primera vez en la historia de la CBI, dicha cuota fue rechazada debido a la oposición de Japón y sus aliados, después que la Comisión no aprobara una propuesta japonesa que buscaba reiniciar la ballenería comercial a través de la denominada “cuota de caza costera”.
Desde entonces, las negociaciones entre ambas naciones para lograr un acuerdo no han cesado. El pasado 24 de junio, Noboyuki Yagi, vocero de la Embajada de Japón en Washington (EE.UU.) declaró que su gobierno había decidido replantear su posición respecto al tema y afirmó que de realizarse una votación interina, Japón apoyaría la frustrada propuesta presentada por Rusia y Estados Unidos en la CBI.
En un nuevo cambio de postura, el gobierno de Japón declaró hoy que a pesar de apoyar la ballenería aborigen, todavía existen muchos puntos por resolver, como por ejemplo la revisión anual y no quinquenal de las cuotas de caza aborigen.
Mientras Estados Unidos anunció que realizaría una nueva votación sobre el tema antes de Octubre, fecha en que se realizará una reunión especial de la CBI sobre el Esquema de Manejo Revisado (EMS), el comisionado de Japón en la CBI, Masayuki Komatsu, afirmó este miércoles que su gobierno intentaría bloquear la propuesta norteamericana con el fin de limitar la caza aborigen. “Nuestro objetivo no es la comunidad esquimal, es el doble estándar de Estados Unidos”, declaró Komatsu en referencia a la oposición de Estados Unidos a la propuesta presentada por Japón sobre cuotas de caza costera.
Fuente: Associates Press