Argentina, 26 de Abril de 2002 – Las principales ONG vinculadas al estudio científico y la conservación de los mamíferos marinos, se encuentran trabajando cooperativamente con Cancillería Argentina a fin de que técnicamente la delegación de ese país cuente con los fundamentos que permitan solidamente defender la posición conservacionista de nuestro país.
Sin embargo, todos estos esfuerzos pueden llegar a ser inútiles, si la Cancillería no asigna los fondos para que el Comisionado y su secretario viajen a esta importante reunión para expresar el voto argentino. Estos funcionarios tienen gran experiencia en esta temática y su presencia es vital.
Diego Taboada, director del Instituto de Conservación de Ballenas (ICB) de Argentina, manifestó que “Consideramos que la Argentina, como uno de los países fundadores de la CBI no puede estar ausente dada la magnitud de los temas que se debatirán este año, estará en juego nuestro apoyo a la propuesta de establecer un Santuario en el Atlántico Sur. No estamos ajenos de los graves problemas que atraviesa nuestro país, pero esto no debe permitir que Argentina no pueda expresar su voto en favor de la protección de estas especies. . |
Nuestro país siempre ha tenido una presencia intachable y debemos aunar esfuerzos para que la crisis que hoy enfrentamos, no nos impida resguardar el futuro de estos animales. No ser parte de su protección y permitir su destrucción con fines comerciales dejará perplejos a nuestros descendientes.
Respecto a este tema, el Dr. Roger Payne, fundador de la Whale Conservation Institute, cuya filial en Argentina es el ICB, ha declarado que: “habremos sido la generación que investigó Marte en busca de las evidencias más tenues de vida, pero que no pudo experimentar la suficiente sensación de ultraje moral para detener la destrucción de las manifestaciones de vida más imponentes que había aquí en la Tierra.”
Por otra parte, Milko Schvartzman, coordinador de la Campaña Ballenas de Greenpeace sostuvo que: “En mayo próximo se librará la madre de las batallas para salvar a las ballenas, Argentina debe estar ahí con los representantes más competentes” “Argentina ha propuesto junto a Brasil, la creación del Santuario Ballenero del Atlántico Sur, es de esperar que los funcionarios enviados sean los más diestros para defenderlo de Japón y sus votos comprados”.
Existen una infinidad de argumentos por lo cual el gobierno Argentino no puede dejar de estar presente, pero si de poner argumentos económicos se trata: Argentina es uno de los líderes en el turismo de avistaje de ballenas a nivel mundial. Se estima que anualmente los ingresos directos por la actividad de avistaje de ballenas representa en nuestro país más de 60 millones de dólares y en todo el mundo más de 1000 millones de dólares (IFAW). La protección de las ballenas es imprescindible para la continuidad y crecimiento de esta actividad generadora de divisas. Además, ¿no sería contradictorio fomentar el turismo de avistaje de ballenas, sin proteger a estos animales no solo en nuestras costas, sino en sus rutas de migración?
El Canciller Ruckauf debe entender estos argumentos y tomar la decisión de enviar a la delegación argentina a esta reunión y así manifestar el voto a favor de las ballenas. Esta acción, en momentos tan caóticos traerá una luz de esperanza, ya que en los momentos de mayores crisis económicas es cuando se cometen los peores desastres contra el medio ambiente.