Estados Unidos se aleja de su tradición conservacionista al proponer la resolución para Mantener el Progreso en el Futuro de la Comisión Ballenera Internacional, CBI. Dicha resolución es co-patrocinada por Nueva Zelanda.
Para algunos expertos de las organizaciones no gubernamentales, la Resolución pretende utilizar el consenso como único mecanismo para tratar los asuntos de la CBI, evitando así, el uso de la votación para detener la cacería de ballenas y hacer avanzar temas vitales en conservación de ballenas.
José Truda Palazzo Jr., ex-Comisionado de Brasil ante la CBI, dijo que en casi treinta años en la Comisión nunca hubo un intento tan escandaloso de suprimir el debate sobre la caza, impedir la toma de decisiones y alienar la sociedad civil, todo para proteger el acuerdo entre Japón y Estados Unidos. para sus respectivos intereses balleneros.
Es tiempo de que el resto del mundo sepa y tome posición en contra de ese absurdo. Para otros sectores de la sociedad civil, la Resolución es una especie de “Caballo de Troya”, que intenta legitimar una la cacería comercial de ballenas.
“Resulta irónico que la única oportunidad real que ha tenido la CBI durante la última década para asegurar un futuro prometedor a las poblaciones de ballenas pueda ser desechada por las políticas actuales pro balleneras de países históricamente conservacionistas.” Manifestó Elsa Cabrera, Directora Ejecutiva del Centro de Conservación Cetácea de Chile.
Para empeorar las cosas, la Comisión limitó -una vez más- el uso de la palabra de las ONGs a intervenciones de media hora distribuida en tres bloques en temas estrictamente no polémicos.
La Doctora Sandra Altherr de la organización alemana Pro Wildlife sostuvo que “Nosotros queremos documentar que las ONGs tenemos nuestro trabajo limitado en la CBI, mientras que gozamos de mucha más libertad en otros foros internacionales.”
Sidney Holt quien representa a “The Antartic and Southern Ocean Coalition, ASOC” declaró que “Es triste que la CBI continúa la política arcaica de poner un bozal a la sociedad civil, apartándose de las Naciones Unidas y otros organismos internacionales. Vengo a este foro desde 1961 y la CBI retrocede cada vez más en este tema”.
Roxana Schteinbarg , coordinadora ejecutiva del Instituto de Conservación de Ballenas de Argentina sostuvo: “estamos aquí para expresar la voz de la ciudadanía, sin embargo nos sentimos amordazados.“
Finalmente par Marlon Mills la representante del San Vicente y las Granadinas de la coalición caribeña “Eastern Caribbean Coalition for Environmental Awareness, ECCEA,“Las prácticas balleneras y los temas que afectan las poblaciones de ballenas no necesariamente son bien representados por ciertas autoridades de algunas naciones en la CBI. Por esta razón es de suma importancia que las voces de las ONGs sean escuchadas para que brinden balance y perspectiva en el nivel de decisión de la CBI”
Para mayor información Comuníquese con Elsa Cabrera al info@ccc-chile.org o 56 09 9 2205225.