El pasado miércoles fue encontrada muerta una ballena en el bulbo de proa de un crucero de lujo cerca de la ciudad de Juneau en Alaska. Según declaró Julie Speegle, portavoz de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA, por sus siglas en inglés), correspondería a una ballena jorobada joven, que posiblemente ya estaba muerta al momento del impacto.
Este sería el tercer incidente similar que sufre la flota de la empresa de Alaska Princess Cruises en una década, dijeron los responsables. Esta vez fue el turno de la embarcación “Sapphire Princess”, que fue detenida brevemente por responsables de la Guardia Costera de Estados Unidos y del Servicio Nacional de Pesca Marítima del NOAA, para comenzar una investigación y sacar el cuerpo del cetáceo para su posterior estudio, luego se le permitió proceder con su ruta.
La línea de cruceros el jueves emitió un comunicado diciendo que la compañía se sorprendió con el accidente y que la tripulación del buque no sintió ningún impacto, ni vio ninguna ballena cerca de la embarcación antes de que encontraran al animal muerto.
En Chile, los reportes sobre colisones entre ballenas y embarcaciones continua siendo baja. El más reciente corresponde a inicios del año 2009, cuando el crucero Radiance of the Seas de la Royal Caribbean International llegó a Puerto Montt, con una hembra de ballena sei de aproximadamente 14 metros de longitud, muerta sobre el bulbo de proa.
Ese mismo año, expertos internacionales junto a Centro de Conservación Cetacea (CCC) presentaron el caso en el comité científico de la Comisión Ballenera Internacional (CBI) destacando la necesidad de aumentar los esfuerzos en reportar estos eventos, desarrollar programas de investigación para evaluar impactos y consolidar el trabajo cooperativo con la Armada de Chile para implementar medidas especiales en áreas claves para distintas especies de cetáceos.
Para Bárbara Galletti, presidenta de CCC y coordinadora científica del Proyecto Alfaguara “el caso del noroeste de la región de Los Lagos requiere una consideración especial ya que corresponde al área de alimentación de una de las poblaciones más importantes de ballena azul en todo el hemisferio sur y coincide con la mayor frecuencia de tránsito de grandes embarcaciones marinas”. Para Galletti, “resulta urgente implementar medidas orientadas a reducir la velocidad de las grandes embarcaciones que transitan por esta área o modificar su ruta de navegación durante la tempoarada de concentración de ballenas”.
Fuente: Reuters, La Tercera, CCC