La recientes declaraciones del Jefe del Departamento de Protección de Recursos Naturales de la Comisión Nacional de Medio Ambiente (Conama), Jaime Rovira, al diario electrónico elmostrador.cl, generaron la reacción de las organizaciones ambientalistas que llamaron al gobierno a intervenir debido a la falta de transparencia y de profesionalismo con que se está conduciendo el proceso de clasificación del estado de conservación de la fauna nacional, que ha dejado fuera del estatus de “En Peligro” a la ballena azul.
Ecoceanos y el Centro de Conservación Cetácea afirman que es preocupante que tanto los ciudadanos como otras instancias gubernamentales, se sigan informando a través de la prensa de las iniciativas de algunos funcionarios de gobierno que buscan generar condiciones para llevar a la ciudadanía y autoridades a conclusiones erróneas sobre el estado de conservación de las poblaciones de mamíferos marinos presentes en aguas chilenas.
Las Ongs hacen mención específica a la ballena azul, especie protegida desde 1966 por la Comisión Ballenera Internacional (CBI), debido a que sus poblaciones fueron reducidas a menos de un 1% por las operaciones de caza comercial y que actualmente se encuentra clasificada en el estatus de “En Peligro” por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN).
Las organizaciones ambientales afirman que “siendo la ballena azul una especie altamente migratoria, la CONAMA no tiene la competencia para decidir sobre el estado de clasificación de la especie, considerando que durante junio de este año el Comité Científico de la CBI iniciará la evaluación comprensiva de las poblaciones de ballena azul, y la IUCN se encuentra reevaluando la clasificación de especies de grandes cetáceos, incluida la ballena azul”.
“Por lo tanto, la CONAMA no tiene autoridad para dejar fuera de la lista de especies ‘en peligro’ a la ballena azul hasta que los organismos internacionales, que tienen conocimiento científico sobre la materia, hayan evaluado seriamente la información y tomado decisiones acordes”, afirmas las organizaciones.
Destacan además que las declaraciones de Rovira son particularmente preocupantes, considerando los compromisos internacionales que el país mantiene en diversos acuerdos internacionales como la CBI, la Convención Internacional para el Comercio de Especies de Flora y Fauna Amenazada (C ITES), la Convención de Diversidad Biológica (CBD) y la Convención de Especies Migratorias (CMS) entre otras.
Agregan que las declaraciones del Jefe del Departamento de Protección de Recursos Naturales de la CONAMA, van en contra de las decisiones tomadas en varios acuerdos internacionales de los cuales Chile es Parte, tal como CITES, la que actualmente mantiene a todas las especies de grandes cetáceos en el Apéndice I (en peligro de extinción), hasta que la Comisión Ballenera Internacional determine que sus poblaciones se han recuperado.
Para las organizaciones ciudadanas, los anuncios realizados como parte del proceso de clasificación de especies, coloca al país en una inconfortable posición frente a la comunidad internacional a pocos días de iniciarse la 8ª Conferencia de las Partes de la Convención sobre la Diversidad Biológica
(CDB) a realizarse los próximos días en Curitiba, Brasil.
Adicionalmente, los organismos expresan que la propuesta realizada por la CONAMA, que deja fuera a la ballena azul por un período de un semestre y a otras especies del archipiélago de Juan Fernández por un periodo de un año, refleja un espíritu cortoplacista y burocrático, carente de fundamentos científicos.
“Considerando que Chile tiene el interés de ser anfitrión de la Comisión Ballenera Internacional en 2008, la posición expresada por la Conama podría llevar al país a sufrir una de las mayores vergüenzas internacionales con respecto a la conservación de la especie de ballena más emblemática a nivel mundial”, afirman las Ongs..
Para Elsa Cabrera, directora ejecutiva del Centro de Conservación Cetacea (CCC), organización que actualmente desarrolla el proyecto de conservación e investigación “Alfaguara” (ballena azul) en el sector noroeste del archipiélago de Chiloé, “las declaraciones del Sr. Rovira evidencian un preocupante nivel de desconocimiento sobre las poblaciones de ballena azul del hemisferio sur y no representan el interés de la ciudadanía u otros organismos de Gobierno sobre la urgente necesidad de implementar medidas de conservación efectivas paras las poblaciones de ballena azul presentes en aguas chilenas”.
Cabrera agregó que “llama muchísimo la atención las declaraciones del Sr. Rovira, ya que por un lado aparece apoyando la creación de un Área Marina Protegida para la ballena azul debido a la necesidad de proteger la especie, y por otra considera que no es necesario incluirla en la lista de especies en peligro debido a la falta de datos científicos”.
“Cuesta ser optimista sobre el futuro de la conservación de nuestro patrimonio natural con funcionarios como el Sr. Rovira a cargo de nuestro patrimonio en recursos naturales”, señaló Cabrera.
Por su parte el médico veterinario, Juan Carlos Cárdenas, director del Centro Ecocéanos dijo que “ahora el ‘peso de la prueba’ se encuentra en manos de la Conama, “quien deberá demostrar a la sociedad chilena y a la comunidad internacional interesada en la protección de la biodiversidad marina, cuales son los antecedentes que posee que justifican sus particulares criterios de clasificación sobre ballena azul y lobo fino de Juan Fernández”.