En conmemoración del Día de los Océanos más de 56 organizaciones civiles de 13 países realizaron un sólido llamado al gobierno de Sudáfrica para que apoye como copatrocinador la propuesta para la creación del Santuario de Ballenas del Atlántico Sur. Esta será la iniciativa más importante para a conservación de las ballenas que se presentará durante la próxima reunión anual de la Comisión Ballenera Internacional (CBI) a desarrollarse entre el 02 y 06 de Julio en Panamá.

La propuesta, que requiere al menos el 75 por ciento de los votos de los miembros de la CBI, no ha podido ser adoptada por más de una década debido a la presión ejercida por las naciones con intereses balleneros, a través de una agresiva política de “compra de votos” conducida por el gobierno de Japón y por Estados Unidos que busca imponer el consenso como único mecanismo de decisión de la CBI, eliminando cualquier posibilidad de crear nuevas áreas de protección para cetáceos en aguas internacionales en el futuro.

A pesar de ser liderada durante varios años por Brasil, Argentina y Sudáfrica, en el 2011 este último país decidió no continuar copatrocinando la propuesta a pesar de haber expresado en diversas oportunidades que el uso no letal de las ballenas es la mejor forma de utilización de estos mamíferos marinos y que el país no tiene ninguna intención de volver a ser una nación ballenera.

Recientemente Uruguay anunció que copatrocinará esta importante iniciativa en Panamá, la cual también cuenta con el sólido respaldo de todos los países de Latinoamérica y El Caribe que forma parte del grupo Buenos Aires.

Con el fin de contar nuevamente con el importante apoyo de Sudáfrica, en carta dirigida a la Ministra de Asuntos Exteriores y al Ministro de Turismo de Sudáfrica, las organizaciones afirmaron que habiendo apoyado desde el inicio esta propuesta como copatrocinador del santuario de ballenas, “fue una desafortunada sorpresa conocer el anuncio, unos años después, que Sudáfrica ya no copatrocinaría esta importante propuesta de conservación marina”.

El mensaje agrega que la nación africana ha afirmado en reiteradas oportunidades su política de Estado comprometida con la conservación y uso no letal de los cetáceos, debido a que el avistamiento de ballenas genera grandes beneficios, en especial para comunidades de escasos recursos. Consecuentemente el país afirmó en 2007 que “posee la obligación de asegurar la protección de las poblaciones de ballenas, apoyando la creación del santuario”.

“Desde 1991 el número de personas que avistan ballenas en Sudáfrica se ha incrementado de seis mil a más de medio millón, generando más de 61 millones de dólares en 2008. La creación del Santuario de Ballenas del Atlántico Sur garantizará la protección a largo plazo de especies clave para el avistamiento de ballenas, así como la sostenibilidad de la industria en lugares mundialmente reconocidos como Hermanus, Ciudad del Cabo y Mossel Bay, entre otros” sostienen las organizaciones.

Sin embargo alertan que “la creciente presión de algunas naciones para revitalizar la caza comercial de ballenas a gran escala en aguas internacionales – especialmente en el hemisferio sur – es una gran amenaza para especies de ballenas en peligro de extinción y en estado vulnerable durante su migración y permanencia fuera de las aguas bajo jurisdicción nacional de los Estados costeros”. Al respecto afirman que “creemos que la creación del Santuario de Ballenas del Atlántico Sur es esencial para cerrar esta brecha y que la propuesta está totalmente en línea con la visión sudafricana de afirmar su derecho al uso no letal y participar en el manejo y conservación de ballenas en alta mar en el marco de la CBI”.

Por ello las organizaciones llamaron al gobierno de Sudáfrica a reconsiderar en las más altas esferas el copatrocinio de dicho país a la propuesta para la creación del santuario de ballenas del Atlántico Sur con el fin que “prevalezcan los intereses comunes de nuestros Estados y los de las personas preocupadas por la conservación de ballenas de ambos lados del Océano Atlántico”.

Para José Truda Palazzo, ex comisionado de Brasil ante la CBI y uno de los gestores de la propuesta del santuario de ballenas del Atlántico Sur expresó que: “Sudáfrica es un país-clave en el continente africano para la conservación marina, por sus ejemplos y liderazgo, y en eso tiene mucho en común con sus vecinos latinoamericanos en la cuenca del Atlántico Sur. Es fundamental que su gobierno, en el más alto nivel, tome la decisión de volver a copatrocinar este Santuario que es un logro clave para el hemisferio sur.”

Fuente: Centro de Conservación Cetacea