Doce países de Latinoamérica se reunieron en Buenos Aires con el objetivo de apoyar la continuidad de la moratoria sobre la caza comercial de ballenas y reafirmar el derecho al uso no letal de los cetáceos en el hemisferio sur. El encuentro fue convocado por el Comisionado de Argentina ante la Comisión Ballenera Internacional (CBI), Embajador Eduardo Iglesias, y como resultado los representantes de los gobiernos se comprometieron a impulsar la firma de un acuerdo regional para el uso no letal y la conservación de cetáceos.
El objetivo de los países que se reunieron en la capital argentina es llevar una posición común a la próxima reunión anual de la CBI, que se llevará a cabo en Alaska (EEUU) en mayo próximo. Además de funcionarios del país anfitrión, participaron representantes de los gobiernos de Chile, Brasil, Perú, México, Panamá, Ecuador, Colombia, Uruguay, Guatemala, República Dominicana y Venezuela.
En el documento final del encuentro, las naciones latinoamericanas reiteraron ‘su firme compromiso con la vigencia de la moratoria internacional sobre la caza de cetáceos’, implementada por la CBI en 1986. Los representantes también destacaron la ‘urgente necesidad de la aprobación’, por parte de la CBI, ‘de los santuarios del Atlántico Sur y del Pacífico Sur, de manera que garanticen la existencia de áreas exentas de caza para la gestión, no letal, de las poblaciones de cetáceos en el hemisferio sur’. Además, expresaron que ‘la implementación del turismo de observación de cetáceos de alta calidad, promueve el crecimiento económico, el desarrollo social y cultural de las comunidades locales’.
Durante la conferencia de prensa realizada en el palacio San Martín, el Vicecanciller argentino, Roberto García Moritán, señaló que “los temas que trata la CBI son de enorme importancia para nuestro país”. Por su parte, María Tereza Mesquita, Comisionada del gobierno de Brasil ante la CBI afirmó que “el resultado principal de esta reunión es que compartimos el objetivo de que se firme un acuerdo latinoamericano de protección de cetáceos.” Al respecto, el Embajador Eduardo Iglesias, indicó que ese convenio puede reforzar la postura de los nueve países latinoamericanos que integran la CBI y que representan un tercio de las naciones conservacionistas del planeta.
En relación a los acuerdos alcanzados por el Grupo de Buenos Aires durante la reunión, el representante de Chile ante la CBI, Francisco Berguño, afirmó que “en todos estos años de carrera diplomática, ésta ha sido una de las reuniones en las que más coincidencias hubo entre todos los participantes.” Por su parte, el Comisionado de México, Lorenzo Rojas Bracho afirmó que “”no estamos defendiendo a las ballenas porque son bonitas, sino porque juegan un papel central en el ecosistema que impacta a todo el mundo”, haciendo alusión a los efectos producidos en el ecosistema marino debido a la sobre explotación de las poblaciones de ballenas durante la ballenería comercial.
Para Elsa Cabrera, directora de Centro de Conservación Cetacea y quien participó como asesora de la delegación chilena “los resultados de la reunión demuestran el nivel de consenso existente en la región sobre la necesidad de consolidar nuestro derecho soberano a utilizar las poblaciones de cetáceos de manera no letal, tanto dentro como fuera de la CBI. En este sentido Chile tiene una oportunidad invaluable como país anfitrión de la 60ma reunión anual de la CBI para adoptar una postura de liderazgo frente a las negociaciones e implementar antes de la reunión de 2008 un acuerdo regional de conservación y uso no letal de cetáceos.”
Al final de la conferencia, los representantes concordaron en la importancia que tiene la sociedad civil organizada en la definición de políticas de conservación, afirmando que son un elemento fundamental para conocer el pulso de la ciudadanía y planificar políticas acordes a los intereses regionales.