Al intenso rechazo que genera la brutal matanza anual de delfines calderones en las Islas Faroe que se lleva a cabo por estos días, diversas agrupaciones civiles europeas están cuestionando la presidencia de Dinamarca en la Unión Europea (UE) argumentando que la política ballenera ese país no cumple con la legislación europea en materia de conservación de cetáceos.
Bajo la UE los países miembro deben cumplir estrictas medidas de protección a los cetáceos, incluyendo la prohibición a la caza y comercio internacional de estos mamíferos marinos. Pero un reporte presentado recientemente por diversas organizaciones sociales, evidencia que a pesar de presidir la UE, Dinamarca transgrede los esfuerzos realizados por la legislación europea para mejorar la protección de las ballenas. Por ello hicieron un llamado a Dinamarca a “reconsiderar su política ballenera”.
A pesar de los crecientes cuestionamientos por los reiterados abusos cometidos en la Comisión Ballenera Internacional al intentar encubrir crecientes operaciones balleneras de carácter comercial como “caza aborigen”, Dinamarca ha endurecido su política ballenera, favoreciendo los intereses de países que no forman parte de la Unión Europea como Islandia, Noruega y Japón. En Enero de 2012 se opuso a la posición pro-conservación de la EU en conservación de cetáceos y a pocas semanas de la próxima reunión de la CBI, aumentó unilateralmente la cuota de ballenas que solicitará en Julio en Panamá cuando se renueve la entrega de cuotas de caza aborigen, sin consultar a los miembros de la UE.
Bajo la UE los países tienen la obligación de acordar por consenso políticas ambientales en foros internacionales, incluyendo la CBI, pero Dinamarca ha evadido deliberadamente cualquier debate en materia de conservación de cetáceos, promoviendo políticas tendientes a generar una nueva forma de caza comercial encubierta inicialmente con fines de subsistencia aborigen.
Tanto Groenlandia como Islas Faroe, ambos territorios de Dinamarca, cazan cetáceos. En Groenlandia se capturan diversas especies de ballenas bajo la modalidad de “caza aborigen”. Esta no tiene carácter comercial y sus cuyas cuotas son por la CBI en base a necesidades nutricionales. A pesar del acelerado desarrollo que ha tenido Groenlandia durante los últimos años, estas capturas han aumentado en numero y especies, incluyendo ballenas jorobadas de una población que es compartida por República Dominicana y brinda favorables beneficios a comunidades de ese país mediante el turismo. Por otra parte, comunidades de las Islas Faroe matan brutalmente cientos de delfines calderón al año – incluyendo hembras preñadas, madres lactantes y crías – argumentando que forma parte de una tradición milenaria. Como esta especie no se encuentra incluida en los estatutos de la CBI, estas matanzas ocurren fuera de cualquier control internacional.
El reporte de las organizaciones destaca que Dinamarca debe cumplir sus obligaciones legales con la UE en materia de conservación de cetáceos considerando que no afecta los intereses sus territorios toda vez que la moratoria se aplica a la caza comercial y especies como los delfines calderones no cuentan con medidas de conservación o manejo bajo la CBI. Pero el gobierno danés va mucho más allá de las obligaciones con estos territorios autónomos promoviendo una agenda ballenera contraria a la UE e incluso intentando prevenir a la los miembros de la UE de criticar la denominada “caza científica” que Japón realiza en aguas internacionales del Pacífico Norte y el Santuario de Ballenas del Océano Austral.
Una encuesta realizada en Febrero de 2012 evidenció que sólo el cinco por ciento de la población danesa apoya la caza comercial de ballenas, mientras que el 75% espera que el gobierno actúe en contra de políticas pro balleneras. Sin embargo las autoridades hacen todo lo contrario, desafiando los intereses de sus ciudadanos e ignorando sus obligaciones como miembro de la UE en esta materia.
Fuente: Euroactiv.com, Fishnewseu.com, Informe “Rompiendo Filas, Dinamarca Avanza Solo en Política Ballenera”, Centro de Conservación Cetacea