(CCC/Ecoceanos News) – El Centro de Conservación Cetacea (CCC) y el Centro Ecoceanos entregaron al Servicio de Evaluación Ambiental un informe respecto a la instalación del proyecto parque eólico Chiloé.
Si bien la tramitación ambiental ingresó bajo una Declaración de Impacto Ambiental, donde no hay espacio de participación ciudadana hasta que el nuevo reglamento sea desarrollado, las organizaciones civiles decidieron de manera voluntaria entregar la información sobre los impactos negativos a las especies de cetáceos así como recomendaciones.
De acuerdo al reporte, para los próximos siete años se espera una inversión por 50 mil millones de dólares en el sector minero, que contrasta con la inversión de 18 mil millones del sector en los últimos 20 años. Así, las proyecciones de crecimiento hacen prever aumentos en el consumo total de energía eléctrica, cuyo principal consumidor es el sector minero. La incorporación de las energías renovables no convencionales (ERNC) a la matriz de generación eléctrica nacional es un proceso inevitable en el largo plazo.
En este sentido, en el documento se señala que el país tiene la responsabilidad de considerar la experiencia internacional con el fin de evitar replicar errores de otros países y recomienda consolidar una política de ordenamiento para el desarrollo de ERNC.
Durante los últimos diez años, la Unión Europea y EEUU han tenido un crecimiento significativo de ERNC, particularmente de parques eólicos. Los impactos asociados al nivel de ruido, impactos visuales, aspectos de seguridad, efectos en el paisaje, arqueología, patrimonio, biodiversidad, así como posible interferencia con la aviación o navegación ya han sido reconocidos. La mejor alternativa de mitigación planteada es evitar zonas sensibles o concentraciones de especies sensibles.
En 2010, la Comisión Euporea publicó lineamientos para el desarrollo de proyectos de energía eólica para la Unión Europea y el Comité Científico de la Comisión Ballenera Internacional expresó que los países deben cooperar para mitigar el impacto sobre la vida marina asociado las ERNC, tales como la eólica. Los parques eólicos operativos producen bandas de ruido de baja frecuencia que son audibles para los cetáceos.
Perturbaciones, efecto barrera y degradación o pérdida del hábitat son algunos impactos adicionales de parques eólicos. Incluso en el caso de la ballena de aleta se ha registrado el desplazamiento de hasta 200km alrededor de parques eólicos.
La zona noroeste de la Isla de Chiloé es un refugio para una gran diversidad de vida marina y anualmente recibe la mayor concentración de ballenas azul en el Hemisherio sur. Adicionalmente la ballena franca austral, clasificada en peligro crítico, el delfín austral y la nutria marina, por destacar algunas, son especies susceptibles a impactos del parque eólico Chiloé debido a su localización propuesta.
Al respecto, el documento recuerda que todas las especies de cetáceos se encuentran protegidas a nivel nacional por la Ley de Protección a los Cetáceos (Ley 20.293) adoptada en 2008 la campaña de CCC, Ecoceanos y Conapach “Chile 2008, Santuario de Ballenas”.
El documento indica que en el caso del parque eólico Chiloé, la alta concentración de especies vulnerables a impactos y la fragilidad de los ecosistemas heterogéneos incluidos en la zona propuesta, así como los perjuicios sociales y económicos, particularmente respecto a la actividad turística preponderante en la Comuna de Ancud y el archipiélago de Chiloé, hacen necesario trasladar el proyecto a una nueva localización en áreas alejadas de la costa, de menor impacto ambiental y social.