Según un estudio de científicos de la Universidad de Texas, el hielo del este de la Antártica comenzó a derretirse más rápido a partir del año 2006, lo que podría llevar a que los niveles del mar suban antes de lo previsto.
En el estudio publicado por la revista Nature Geoscience, los científicos estimaron que el este de la Antártica perdió hielo a una tasa media de cinco a 109 gigatoneladas por año desde abril de 2002 a enero de 2009, aunque a un ritmo más rápido desde 2006. De acuerdo a los investigadores, la tasa de derretimiento desde 2006 podría ser incluso mayor. La región completa de la Antártica estaría perdiendo hielo a una tasa de 113 a 267 gigatoneladas al año, con 106 a 158 gigatoneladas desprendiéndose del oeste de la Antártica, estimaron los científicos.
Jianli Chen del centro de investigación espacial de la universidad y uno de los autores del estudio, afirmó que “El resultado clave es que empezamos a ver una gran cantidad de deshielo en el este de la Antártica, principalmente en las extensas regiones costeras (en Wilkes Land y Victoria Land), a partir de 2006”. Agregó que “De ser confirmado, indicaría un cambio de estado del este de la Antártica, lo cual podría plantear un gran impacto en los niveles marinos del mundo en el futuro”.
El cambio climático está convirtiendo el hielo de la Antártica en uno de los mayores riesgos para los próximos siglos. Así lo demuestra los grandes bloques de hielo desprendidos de la Antártica como resultado del incremento de la temperatura global que avanzan actualmente rumbo a las costas de Nueva Zelanda.
Los icebergs, que han sido estimados en más de un centenar, alcanzan más de 200 metros de longitud y se encuentran a unos 450 kilómetros al noreste de la isla del Sur, la mayor de Nueva Zelanda.
A pesar que las altas temperaturas serían la principal causa del deshielo antártico, los líderes mundiales se han rehusado a adoptar un acuerdo vinculante que reduzca las emisiones de carbono durante la próxima cumbre de la ONU en Copenhague.
Fuentes: Reuters, PrensaLatina